Horror Con 2014

La fiesta del miedo regresa

Por Luis Suñer McAllen, Tx

La Horror Con se está convirtiendo en un evento de tradición en la ciudad de McAllen, cada año más y más personas acuden en compañía de toda la familia a ser parte de los festejos que la exposición trae consigo mientras que aprovechan para conocer a celebridades del medio. Y es que por tercer año consecutivo se celebró en el Centro de convenciones de McAllen el Festival y convención de horror del sur de Texas 2014. Desde muy temprano se podían observar las filas para entrar llenas de personas disfrazadas de sus personajes favoritos, lo mismo se podían ver zombis, vampiros y demonios, que soldados, cazafantasmas y ángeles; algunos queriendo asustar a los más chicos, aunque esta vez algunos niños asustaban más que los grandes con sus disfraces muy bien elaborados.

En el interior de la convención abundaban las mesas con artículos no sólo relacionados al género del terror sino que también había juguetes, historietas y las personas se podían topar con personajes tan poco común como divertidos, al grado que se detenían a tomarse fotos con quien se los pidiera. Además de los tradicionales vendedores de mercancía alusiva al evento, había artesanías, mesas informativas e incluso las Rolleristas del sur de Texas estuvieron presentes invitando a las personas a unirse al grupo. Entre los artistas invitados estuvieron Sonequa Martin Green, de la popular serie Walking Dead, Kevin Grevioux, creador de las cintas Underworld, además de Kane Hodder,Bob Elmore, Andrew Bryniarski entre otros que hicieron que los espectadores corrieran a obtener sus autógrafos.

Dentro de los espectáculos que se presentaron estaba el del grupo Pickled Punk Sideshow, quienes regresaron de nueva cuenta a hacer sus locuras en el escenario, un acto no apto para cardiacos que incluía meterse clavos y taladros por la nariz, atraparse la lengua con trampas para ratones, sostener a una persona con los dientes e incluso tirarse a un montón de vidrios con los pies descalzos. Drew Blood, fundador y estrella del espectáculo, realizó una actuación en la que invita al público a ver de cerca sus “desagradables” actos. Pickled Punk Sideshow cierra su acto con la engrapada de propinas en cualquier parte del cuerpo. “Nos dejamos grapar en un brazo por cinco dólares, la frente te cuesta 20 y por su puesto las fotos son gratis”, dijo Blood. Por los pasillos se observaba público de todas las edades con atuendos estrafalarios que provocaba voltear a cualquiera que se topara con ellos.

Además se instaló de nuevo el pasillo del tatuaje donde las personas podían hacerse ahí mismo un tatuaje con todas las medidas de seguridad permitidas y al final de la tarde se realizó un concurso al mejor tatuaje. McAllen demostró una vez más que está ávido de este tipo de espectáculos y que hay público no sólo para atracciones convencionales, sino para gustos más estrafalarios.