Transformers 4

  Fósiles con tuercas

Como si no hubiera sido suficiente producir tres películas sobre los Transformers o Transformables para darle el toque tropical, esos juguetitos que fueron sensación en la década de los 80, el director y productor Michael Bay, ha decido rehacer la franquicia sin perder la poca continuidad y nos trae ahora Transformers 4: Age of Extintion. La nostalgia por los “buenos tiempos” siempre ha estado presente en el cine, en los años 70 se realizaron una serie de trabajos con la década de los 50 como marco referencial, ahora en el nuevo milenio, los 80 parecen tan lejanos para muchos y por eso esta nueva corriente de productos relacionados a esa época han aparecido con mucho éxito, al grado que tuvimos GI Joe, Transformers y pronto veremos a las Tortugas ninja, Jem y las hologramas y se habla de He-Man. El problema no es querer revivir viejas franquicias y sacar dinero de ellas, el problema es que las historias difícilmente dan para realizar una película ya que la sicología de los personajes basados en caricaturas para niños es casi nula, en el caso de Transformers es simplemente robots buenos contra robots malos y esto se ve reflejado en la línea argumental de la secuelas que tal parece que ante la falta de congruencia de los guiones, el director avienta más explosiones a la pantalla buscando que nadie se dé cuenta de lo que está pasando (¿Alguien sabe qué pasó con los robots que salieron en las anteriores cintas y no murieron?). Habrá quien diga “yo con mis palomitas y refresco en mano, lo demás no me importa” y por supuesto que está en lo correcto, hay personas que sólo buscan distraerse un poco de la rutina y ver buenos efectos especiales generados por computadora, pero para quienes buscamos en el cine algo más que efectos especiales, Transformes 4 está de más y quitándole la oportunidad a otras cintas de encontrar un lugar en la cartelera. Pero al final del día usted tiene la última palabra y si decide ir a verla, no diga que no se lo advertí.

Fotos vía: Getty Images