Horror 2013,

Horror 2013,

diciembre 8, 2013 Desactivado Por GDLFashion

 El terror toca a las puertas de McAllen 

Desde McAllen Por: Luis Suñer

 

Por segundo año consecutivo se celebró en el Centro de Convenciones de la ciudad de McAllen, Texas, el Festival y Convención de Horror del Sur de Texas.

Desde muy temprano se observaban las filas para entrar personas disfrazadas de sus personajes favoritos, lo mismo se podían ver zombis, vampiros y demonios, que soldados, cazafantasmas y ángeles; algunos, incluso, aprovecharon para asustar a uno que otro niño impresionable.

En el interior de la convención abundaban las mesas con artículos no sólo relacionados al género del terror sino también había juguetes, historietas y las personas se podían topar con personajes tan inusuales como divertidos.

Y es que además de los tradicionales vendedores de mercancía, había una bruja, como ella se hacía llamar, que leía varios tipos de cartas: desde el tradicional Tarot hasta cartas de hadas y de temas egipcios; también artistas del tatuaje que ahí mismo realizaron los más increíbles diseños.

El Colegio del Sur de Texas, a través de la Escuela de Arte Culinario, montó una mesa donde realizaron, a tamaño natural, al actor Michael Rooker con materiales comestibles; el actor, al verla, agradeció el detalle y se tomó fotos con los estudiantes mientras realizaba bromas y se divertía con los curiosos que corrieron a captar el momento con sus cámaras.

Otros actores que participaron fueron Fred Williamson, Mark Patton, Betsy Baker, Theresa Tilly y Sid Haig, quienes firmaron autógrafos y se tomron fotos con los asistentes; de acuerdo a un miembro de la seguridad, los artistas siempre se portaron muy amables y accesibles, “incluso ya me invitaron a tomar unos tragos al salir de aquí”, indicó el guardia.

Dentro de los espectáculos que se presentaron estaba el del grupo Pickled Punk Sideshow, los cuales cuentan con un acto no apto para cardiacos, que incluyó introducir clavos y taladros por la nariz, atraparse la lengua con trampas para ratones, sostener a una persona con los dientes y caminar sobre un montón de vidrios con los pies descalzos. “Desafortunadamente no nos dejaron usar maquinaría pesada, pero ya será en otra ocasión”, explicó al público Drew Blood, fundador y estrella del espectáculo. Pickled Punk Sideshow cerró su acto con la engrapada de propinas en cualquier parte del cuerpo. “Nos dejamos grapar en un brazo por cinco dólares, la frente te cuesta 20”, dijo Blood.

Por los pasillos se observaba público de todas las edades con atuendos estrafalarios que provocaba voltear a cualquiera que se topara con ellos.

Además de poderse tatuar, las personas aficionadas a este ancestral arte tuvieron la oportunidad de conocer a Megan Massacre, artista neoyorkina del tatuaje, quien saludó a los presentes y firmó autógrafos.